Esta canción habla de mí

Las notas musicales se deslizan de forma serena por las cinco líneas del pentagrama. La clave, siempre en el mismo sitio, es el centro alrededor del cual giran las demás. Todo encaja perfectamente y, tan siquiera verlo proporciona una sensación de armonía, de que todo encaja naturalmente.

En ocasiones, en medio de una sinfonía, algo destaca: es un pequeño fraseo, un instrumento que, por un momento, destaca sobre el resto. Lo escuchas y tienes la sensación de que, muchas veces, un pequeño detalle embellece un todo que, de no existir, sería difere
nte.

¿Cuántas veces lo has dicho? «Esta canción habla de mí». Lo piensas, y parece que el compositor se ha puesto en tu piel, ha sentido exactamente lo mismo que tú en el mismo momento y lo ha expresado de una forma única, como solo tú harías. Tienes la sensación de que no estás sola.
Piénsalo: el día es lluvioso y gris, na
da te sale como esperas. Pero vas de camino al trabajo y te para una melodía reconocible, que había tiempo no escuchabas —o no de la misma manera—. De una forma casi sobrenatural, una sonrisa se dibuja en tu cara, y no sabes por qué. El día, de repente es radiante y luminoso, y todo va cobrandsentido. ¿Te ha pasado? Son canciones que parecen construidas para cambiarte.

El efecto que tiene una joya dentro de una colección puede ser el mismo: cada elemento está en su sitio, todo concuerda, cada pequeño detalle te embellece, te diferencia pero también te hace sentir que formas parte de esa minoría que puede decirlo: «Esta canción habla de mí».

Por eso, hoy, Fiesta de la Música, déjate acompañar por esa melodía que te solía hacer sentir única. Sal y disfruta de un concierto; descubre un nuevo artista; rodéate de sonidos que te hagan sentir que todo encaja. Porque la música es el arte que sosiega, acompaña, sugiere, te reconfigura. Porque la música es el arte más completo del mundo; y tú, también.